Por donde se le vea, la inseguridad es el peor problema que tiene San Martín Texmelucan.
La ejecución de ayer de un presunto delincuente al interior de la primaria José María Morelos y Pavón por parte de otro delincuente en Santa María Moyotzingo, es el fiel reflejo de la grave crisis de inseguridad de ese municipio.
La maestra herida por el ataque armado es el reflejo del daño que la delincuencia le hace a la sociedad de Texmelucan y de todas las víctimas que sufren asaltos, robos o que han perdido la vida.
Moyotzingo es una verdadera cueva de ladrones en donde operan las bandas dedicadas a los asaltos y homicidios de personas que caen en el engaño de las falsas ofertas de venta de vehículos, de robo de vehículos de carga y asaltos.
Por eso no extraña el inédito ataque al interior de una primaria en Moyotzingo.
Lamentablemente, el caso de Texmelucan es como el de Puebla, Amozoc, San Andrés Cholula, Tecamachalco, Tepeaca, Quecholac y otros tantos en donde las bandas criminales operan con toda impunidad.
Aunque las autoridades dicen que son casos aislados, que son ataques entre grupos criminales, lo cierto es que la sociedad es la principal afectada porque ya nadie está seguro en ninguna parte.
Así que el gobernador electo, Alejandro Armenta, y su equipo de trabajo tienen mucho qué hacer a partir de diciembre próximo, porque les dejarán un estado lleno de delincuentes.
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