El turismo en Puebla está viviendo un momento crucial, marcado por retos y oportunidades que podrían transformar la cara del estado en los próximos años. Bajo la visión del gobernador Alejandro Armenta, Puebla busca consolidarse no solo como un destino de belleza natural y riqueza cultural, sino como un referente en el turismo sostenible, inclusivo y regenerativo. La participación del estado en Fitur 2025 es un reflejo de este ambicioso objetivo.
Puebla, con su vasta oferta turística que abarca desde los famosos Pueblos Mágicos, como Cholula, Atlixco y Zacatlán, hasta su herencia gastronómica, arte y tradiciones, enfrenta un desafío claro: cómo integrar de manera armoniosa estos atractivos para lograr un crecimiento turístico inclusivo. Los 12 Pueblos Mágicos y los 50 municipios con vocación turística tienen un enorme potencial, pero para que este crezca de manera equilibrada y sin afectar el entorno, es necesario implementar estrategias que promuevan un turismo más responsable y accesible. Aquí entra en juego el modelo propuesto por Armenta: un turismo que, además de generar ingresos, preserve el patrimonio cultural y natural de Puebla, y beneficie directamente a las comunidades locales.
Bajo la administración de Alejandro Armenta, Puebla ha puesto un énfasis especial en el desarrollo de un modelo de turismo sostenible y regenerativo. Esto implica no solo atraer visitantes, sino también que el turismo se convierta en un motor de desarrollo para las comunidades, creando empleos dignos y respetando la biodiversidad. Este enfoque ha sido clave para el impulso de proyectos como el convenio con la Yunta de Galicia para aplicar prácticas de turismo rural, inspirado en el exitoso Camino de Santiago, un ejemplo claro de cómo el turismo puede fomentar el desarrollo de comunidades a través de la sostenibilidad.
Puebla también está trabajando de la mano con empresas especializadas y organizaciones internacionales para posicionarse como un líder en el turismo regenerativo. Este modelo no solo busca atraer turistas, sino transformarlos en agentes activos de conservación y mejora en las localidades que visitan. Iniciativas como estas tienen el poder de cambiar la forma en que entendemos el turismo y de colocar a Puebla en la vanguardia de este nuevo paradigma.
Fitur 2025: una vitrina para Puebla
La Feria Internacional de Turismo (Fitur) 2025 en Madrid es, sin lugar a dudas, una de las plataformas más importantes para mostrar los avances de Puebla en el sector turístico. La participación del estado en este evento no es solo una cuestión de visibilidad, sino de demostrar que Puebla tiene mucho que ofrecer a los turistas internacionales. En el stand de Puebla, los 12 Pueblos Mágicos, la gastronomía local, las artesanías y los paisajes naturales son los grandes protagonistas, lo que permite a los asistentes conocer, de primera mano, lo que hace único al estado.
El trabajo realizado por la Secretaría de Turismo de Puebla en Fitur, con reuniones estratégicas con medios internacionales, agencias de viajes y otros actores clave, es un reflejo del compromiso del gobernador Armenta por posicionar al estado en el mercado turístico global. Además, la degustación de platillos emblemáticos como el Mole Poblano y los Chiles en Nogada durante la inauguración, permite que los turistas puedan experimentar la rica oferta gastronómica de Puebla de una manera sensorial.
Desafíos en el camino: infraestructura y accesibilidad
A pesar de los avances, los retos son evidentes. La infraestructura turística en ciertas regiones de Puebla aún requiere de inversiones sustanciales para garantizar una experiencia de calidad para los turistas. A medida que el estado sigue creciendo como destino turístico, es esencial mejorar la conectividad, especialmente en áreas rurales y en los Pueblos Mágicos. Asimismo, la capacitación continua de los actores locales, desde prestadores de servicios hasta comunidades enteras, es indispensable para asegurar que el turismo beneficie realmente a todos los sectores de la sociedad.
Otro desafío importante es la gestión de flujos turísticos. A medida que el interés por Puebla crece, especialmente por su oferta cultural y gastronómica, es necesario encontrar un equilibrio entre el crecimiento del sector y la conservación del patrimonio. Esto significa implementar políticas que regulen el turismo de masas y fomenten un enfoque más responsable y respetuoso con los recursos naturales y las tradiciones locales.
Mirando hacia el futuro
Puebla tiene un futuro brillante en el turismo, pero los retos son igualmente significativos. El liderazgo de Alejandro Armenta es clave en este proceso de transformación, enfocando esfuerzos en un modelo de turismo que no solo sea rentable, sino también inclusivo, regenerativo y sostenible. Fitur 2025 es solo el inicio de un camino que, con trabajo conjunto entre el gobierno, las comunidades y el sector privado, puede convertir a Puebla en un referente global del turismo responsable.
El camino por recorrer no será fácil, pero el esfuerzo que se está realizando desde el Gobierno estatal, con el apoyo de los habitantes de Puebla, promete hacer del estado un destino turístico de primer nivel, capaz de atraer a visitantes de todo el mundo, mientras preserva lo que lo hace único: su gente, su cultura y su naturaleza.
