La coordinadora estatal de Movimiento Ciudadano Puebla, también actual diputada local, Fedrha Isabel Suriano Corrales, está metida en serios problemas.
Por una parte, está enemistada a muerte con su antecesor, Fernando Morales Martínez, con quien rompió no hace mucho y a quien le debe la dirigencia de la fuerza naranja, así como todo el conocimiento sobre el manejo del partido.
El pleito entre ambos es a muerte.
Y, por otra, porque Fedrha Suriano le ha jugado al malabarista al relacionarse con personajes de dudosa reputación, a quienes les abrió las puertas de Movimiento Ciudadano –sin consultar a la dirigencia nacional–, y con quienes ya tiene vínculos muy peligrosos.
Prueba de ello es que impuso a Yasmín Medina Carrasco como candidata a la Presidencia Municipal de Chignahuapan, a pesar de que aseguran tiene presuntos vínculos con Juan Lira Maldonado, “El Moco”.
De hecho, el esposo de la abanderada de Movimiento Ciudadano, Javier Hernández, es abogado de Juan Lira.
¿Cuál es la historia de Fedrha Isabel Suriano?
Pues resulta que durante la administración de Fernando Morales al frente de Movimiento Ciudadano en Puebla, la también diputada figuró como secretaria general, por lo que conoce todo el teje y maneje del partido.
Se supone que ella era la mano derecha y de confianza del expriista, quien al momento de lanzarse como candidato al gobierno por Movimiento Ciudadano en la pasada elección, le cedió prácticamente las riendas de organismo.
Fedrha, entonces, aprovechó para meter mano en la designación de candidatos, momento cuando apareció en su camino uno de los hermanos González Vieyra, el de nombre Ramiro, actual presidente municipal de San Nicolás Buenos Aires y quien actualmente está prófugo de la justicia.
De hecho, una de las familiares de la líder de Movimiento Ciudadano, de nombre Adith Galicia Gómez, está incrustada en la nómina del Ayuntamiento de San Nicolás, gobernado por uno de los hermanos González Vieyra, detenidos por delitos federales.
Esta misma persona, incluso, fue regidora en el municipio de Santa Clara Ocoyucan, donde intentó repetir colándose en la planilla del entonces candidato de Movimiento Ciudadano a la presidencia municipal, Rafael Reynoso Mora.
Se dice que ya desde ese momento la líder de Movimiento Ciudadano había perdido el piso y se había empoderado con el cargo que le regaló Fernando Morales, a quien traicionó una vez que saboreó las mieles del poder y del dinero.
El caso es que los roces, diferencias y disputas por el control del partido se agudizaron entre Fedrha y Fernando a tal grado de que rompieron relación, por lo que la primera se encargó de bloquear al exdirigente en su partido.
Una de las primeras disposiciones de la nueva responsable de Movimiento Ciudadano fue sabotear la campaña de Rafael Reynoso, quien no permitió que la sobrina de Fedrha repitiera en la lista de regidores de su planilla y partido.
Sin embargo, el conflicto en Movimiento Ciudadano subió de tono debido a que Fernando Morales le reclamó a la hoy diputada que él la había puesto donde está, y que incluso le debía haber convencido a Dante Delgado Rannauro, coordinador nacional del partido en ese entonces, su nombramiento.
El acuerdo original entre Dante y Fernando, por recomendación del primero, fue que al salir de la coordinación estatal se quedará como presidente del Consejo Estatal de su partido; sin embargo, minutos antes de la asamblea para designarlo le comunicaron, por decisión de Fedrha, que sería Abraham Salazar Pérez, candidato perdedor de Movimiento Ciudadano en San Martín Texmelucan, el elegido y no él.
Después de la asamblea, Fernando y Fedrha refrendaron su pleito, debido a que ella se coló como candidata plurinominal y decidió correr de Movimiento Ciudadano a toda la gente del exdirigente, sin liquidación ni mediación alguna.
Ya el camino de la coordinadora de Movimiento Ciudadano estaba trazado, por lo que fortaleció vínculos con sus ediles y funcionarios, cosa que no gustó a la coordinadora nacional.
Dicen que a Fedrha Suriano todo mundo le recomendó y sugirió evitar lazos y relaciones peligrosas con gente de extraña reputación, pero hizo oídos sordos.
Incluso, aseguran que se encaprichó y por eso designó a Yasmín Medina como abanderada de Movimiento Ciudadano en Chignahuapan, donde cree que van a ganar.
Fueron varias las recomendaciones para la líder Movimiento Ciudadano sobre sus relaciones con los hermanos González Vieyra y los allegados a Juan Lira, pero nunca quiso escuchar. De hecho, trascendió que eran los ediles detenidos los que financiarían la campaña en Chignahuapan.
Ahora, existen versiones de que Fedrha Suriano se alió de facto en Chignahuapan con el PAN, con quien ha tejido y fortalecido lazos en el Congreso del estado, y con quien tiene un doble acuerdo para golpear al presidente municipal de Puebla, Pepe Chedraui, y para ir de la mano en alianza en futuras elecciones, en el 2027 y 2030.
Una de ellas en San Martín Texmelucan, donde Movimiento Ciudadano volvería a impulsar como candidato al perdedor de Abraham Salazar, pues según ellos, ahora sí va a ganar.
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