La detención del alcalde de San Nicolás Buenos Aires, Ramiro González Vieyra, confirma que la Fiscalía General del Estado de Puebla está en buenas manos con Idamis Pastor Betancourt.
La captura de Uruviel González Vieyra, alcalde de Ciudad Serdán; de Giovanny González Vieyra, de Tlachichuca, y ayer de Ramiro González Vieyra, de San Nicolás Buenos Aires, demuestra que Idamis Pastor tiene la capacidad de aplicar la justicia.
Quienes dudaban de la capacidad de Idamis Pastor han tenido que guardar sus críticas, debido a que ha podido esclarecer casos relevantes como la ubicación del menor Isaías y la detención de su padre por el delito de violencia familiar, es otro ejemplo de eficiencia.
O recientemente la detención de la peligrosa líder criminal conocida como “La Dulce”, quien operaba en Puebla, Amozoc y Tepeaca, es un importante golpe a la delincuencia.
Ahora le corresponde al secretario de Seguridad Pública, Francisco Sánchez González, demostrar que también tiene la capacidad de prevención y reacción, ya que en estos meses no ha dado los resultados esperados.
Por más que tiene el apoyo del gobernador Alejandro Armenta, no se han dado los golpes esperados por parte de la Policía Estatal.
La presencia de la Guardia Nacional, de la Marina, del Ejército mexicano y de la FGE han podido contrarrestar a la delincuencia, pero aún se espera más, mucho más de la Policía Estatal y del vicealmirante Francisco Sánchez.
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