Algunos sólo sirven para la foto, sonríen y la comparten en las redes sociales.
Son animales políticos que hacen de una foto, el montaje perfecto a sus aspiraciones.
Son adoradores de la murmuración y del escándalo. De eso viven pues es su alimento.
Pero al igual que en la foto, permanecen estáticos, con la careta de la simulación.
Posan con personajes a quiénes sonríen en público, pero destrozan en lo privado.
Todos sin excepción buscan un puesto de elección, el partido es lo de menos; lo más es hacerse visibles.
Todos quieren, pocos pueden, sólo uno llega.
Y la estrategia?… Bien gracias, no la conocen.
De los que quieren y pueden
Blanca Alcalá Ruiz
Mujer de causas pero también de puestos, desde Secretaria de estado hasta senadora.
Su plataforma más sólida y reciente, la presidencia municipal de Puebla.
Es más, precursora en género. La primera alcaldesa en la ciudad capital.
Sabedora de que la inteligencia no es suficiente para posicionarla, cuida su imagen.
Una imagen que reivindica al género pero que le exige mantenerse en el ámbito.
Ahora como senadora confirma que sus lazos con personajes políticos de peso político son innegables; como innegable es su deseo de contender.
Es la mejor posicionada en este momento.
Su debilidad: Carece de estructura propia sin grupo político definido.
Alberto Jiménez Merino
Hombre talentoso, sabedor de la problemática del campo.
De carácter afable y con don de gente como ninguno.
Lo respetan, lo reconocen y lo admiran; eso no es suficiente.
Con un buen manejo en redes sociales y en medios de comunicación.
De los delegados federales, uno de los mejor posicionados.
Pero justo ahí, está su debilidad.
Sustraigan el traje de funcionario y que nos queda?…
Exactamente, el mismo talento, respeto, reconocimiento pero sin la exposición que el puesto te permite.
Enrique Doger Guerrero
De formación académica con un buen recuerdo como rector de la universidad más importante del Estado.
Polémico y echado para adelante, confiado en el carácter ciudadano que pregona.
Poseedor de una astucia envidiable, sabe hacer de la circunstancia un área de oportunidad, siempre.
Lo mismo critica a los tricolores que a los azules y a los amarillos. Navega en el mar de la confrontación.
Como alcalde de Puebla, aguerrido autónomo confrontado con la estructura marinista.
Ahora ve en los marinistas a un posible grupo de aliados.
Su fortaleza es su debilidad, pues la lleva a los niveles más altos de la exposición mediática.
Hace de la crítica y la ironía, su alimento.
Política congruente
Si hay un político con calidad moral para enjuiciar lo que vive su partido, ése es Alejandro Armenta Mier.
Ex presidente estatal de su partido, dejo pasar oportunidades en aras de lo que alguno llamaron “dejadez” o “exagerada institucionalidad”.
Pudo haber sido candidato a la gubernatura. Pudo haber sido diputado federal plurinominal o senador.
No lo fue. Y eso ahora le permite levantar la voz, exigir sin tapujos que no se premie a los simuladores.
Que la trayectoria y la estrategia sean las herramientas para enfrentar la sucesión del 2016.
No le quita el sueño a quién designen, puede ser Blanca, puede ser Enrique, puede ser Alberto.
Quien decida el partido, pero que se preparen no para el show político.
La madre de las batallas está a la vuelta de la esquina, no hay vuelta de hoja.
Desea que el partido que alguna vez dirigió, se erija como el Ave Fénix, entre las cenizas.
Cenizas que si se remueven, expulsarán las traiciones, las simulaciones, las poses para las fotos, la incongruencia y la deslealtad.
Por eso el diputado federal no tiene empacho. Se hartó y se cansó de la ausencia de estrategia.
La busca y no la encuentra en medio de las fotos y de las reuniones donde van los que quieren.
Y cierto, el PRI se ha convertido en una fuente de complacencia… ¿la exigencia? Ni la conocen.
El estratega
Y quien se ha consolidado como un claro ejemplo de ser un verdadero estratega es el Gobernador del Estado.
Hábil como pocos, tiene en el manejo de las relaciones públicas su mejor herramienta de operación.
El más claro ejemplo, la reciente visita de la Subsecretaria del Trabajo Patricia Martínez.
Trajo el mensaje del Presidente Enrique Peña Nieto. Democracia es gobernar al margen de colores.
Aplaudió lo realizado por un Rafael Moreno Valle, quien ha hecho de las visitas presidenciales su carta de resultados.
Secretarios de Estado –con la representación del Presidente de la República- que no hacen otra cosa que reconocerle.
Mensajes hay muchos, la realidad es sólo una: Peña Nieto no busca pelearse con el Gobernador de Puebla.
Comentarios: jose.tome.c@gmail